viernes, 22 de abril de 2011

De vuelta al siglo XIX...

La historia de la que escribo hoy no trata de perros..
Esta entrada quería dedicársela a un caballo.
Por donde yo paseo con Jara hay (o más bien había) un caballo muy simpático que cada vez que nos veía se acercaba a nosotras y hasta relinchaba...
Era bonito verlo correr,y ver como Jara y él se acercaban...y se saludaban...
Hace unos dias llegó un "señor" con un caballo para hablar con el dueño del caballo del que hoy os hablo..,yo pasaba por allí  y pensé que este "señor" pretendía venderle el otro caballo...pero no.
Cuando volví a pasar,este mismo hombre iba con un caballo de vuelta,pero ya no era el que él traía...era el caballo que veíamos cada día...iba relinchando por el camino,me dio un rabia impresionante.
Todo esto me recordó a una pelicula.."Un caballo llamado furia"..que trataba del intercambio de caballos,como se estuviéramos hablando de cromos..
Ahora el caballo nuevo está en su nuevo establo,adaptándose poco a poco..
No consigo entender como puede haber gente que vea a los seres vivos como objetos,por más vueltas que le doy no encuentro explicación.
Espero que esté donde esté,lo cuiden como se merece...

No hay comentarios:

Publicar un comentario